Poemas de Juan Ramón Jiménez

EL VIAJE DEFINITIVO

 

Y yo me iré. Y se quedarán los pájaros

cantando;

y se quedará mi huerto, con su verde árbol,

y con su pozo blanco.

 

Todas las tardes, el cielo será azul y plácido;

y tocarán, como esta tarde están tocando,

las campanas del campanario.

 

Se morirán aquellos que me amaron;

y el pueblo se hará nuevo cada año;

y en el rincón aquel de mi huerto florido y encalado

mi espíritu errará, nostálgico...

 

Y yo me iré; y estaré solo, sin hogar, sin árbol verde

sin pozo blanco,

sin cielo azul y plácido.

Y se quedarán los pájaros cantando.